Encendedor de linternas.
Él va por todo el mundo para encontrar a las personas que están en el borde del abismo, que están inmersas en trivialidades, en el odio, en la codicia, y que deben ser salvadas. Por esto, la historia de Swami es tan vasta y variada, y tan llena de compasión. Él va a lugares donde otros no son admitidos. ¿Quién puede resistirse a Swami?
Una vez, el Dr. Bhagavantham estaba siendo sometido a cirugía en Bangalore. La atmosfera esta intensa y no se le permitía a nadie entrar al quirófano. ¡Pero Swami se apareció dentro y estuvo parado al lado de la mesa de operación! “¿Cómo pudo entrar esa persona?” –el doctor estaba enojado con las enfermeras. ¡Descuidadas! ¡Negligentes! ¡No trancaron la puerta! –pensó. Él no podía gritarles en ese momento. ¡Pero no hubo ningún descuido, ninguna negligencia, la puerta estaba trancada y la luz roja encendida afuera! ¡No pueden impedirle a Swami que entre por una puerta trancada, o una pared, o una cortina de hierro! Él entró a Letonia, un país comunista. Una poetisa Letona escribió su experiencia de un sueño en un poema. Yo voy a leerles este poema, traducido por una señora alemana:
Extraños sueños aparecieron.
Anoche un encendedor de linternas me visitó
Con un vestido rojo como las amapolas.
Sentándose frente a mí, él se rió de buena gana
Ante mi asombro.
“Perdóname” –balbuceé,
“¿Cómo es que estás aquí? ¿Cómo entraste?”
–Él respondió:
“Tú debes haberme llamado si yo he venido”.
“Tú vivías en tiempos antiguos” –dije.
“Sí, pero no permanezco allá. Vengo al presente.
Sólo me quedo hasta que en un hogar
Todas las linternas hayan sido encendidas
Cuando llega la noche” –dijo Él.
“¿Pero dónde vives? ¿Cuál es tu nombre?” –pregunté yo.
Mi huésped se rió.
“¡Desde aquellos días de antaño, he tenido muchos nombres!
Digamos que hoy mi nombre es Sai Baba.
Yo vivo más allá de mil y una aguas.
Totalmente ocupado. Tengo una naturaleza tan inquieta.
Voy andando por allí para velar
Por que todas las linternas se enciendan
Cuando llega la noche” –dijo Él.
“No te vayas todavía, por favor, no te vayas todavía,
No me dejes” –le rogué.
Anoche me visitó un encendedor de linternas.
Ese es el papel que Swami ha asumido. Yo estaba hablando acerca de una persona que se ahogaba. Eso es encender una linterna, encender una lámpara. Todos estamos en la oscuridad y debemos encender la lámpara, y dejar que la luz entré. Ese es el trabajo de Swami. Él anda dando vueltas… “¡Oh! ¡Esta linterna no ha sido encendida!” Y así enciende esa linterna, y la otra, y la otra… ¡El amor es la luz!
Ese es el hobby de Swami. Dar devoción, encender la lámpara, traer luz y amor a toda la Humanidad.
Selección de un discurso de N. Kasturi.
Correspondiente al libro: Sathya Sai Baba, Dios en Acción.
OMSAIRAMMM...
CENTRO SAI HISPANO...
Él va por todo el mundo para encontrar a las personas que están en el borde del abismo, que están inmersas en trivialidades, en el odio, en la codicia, y que deben ser salvadas. Por esto, la historia de Swami es tan vasta y variada, y tan llena de compasión. Él va a lugares donde otros no son admitidos. ¿Quién puede resistirse a Swami?
Una vez, el Dr. Bhagavantham estaba siendo sometido a cirugía en Bangalore. La atmosfera esta intensa y no se le permitía a nadie entrar al quirófano. ¡Pero Swami se apareció dentro y estuvo parado al lado de la mesa de operación! “¿Cómo pudo entrar esa persona?” –el doctor estaba enojado con las enfermeras. ¡Descuidadas! ¡Negligentes! ¡No trancaron la puerta! –pensó. Él no podía gritarles en ese momento. ¡Pero no hubo ningún descuido, ninguna negligencia, la puerta estaba trancada y la luz roja encendida afuera! ¡No pueden impedirle a Swami que entre por una puerta trancada, o una pared, o una cortina de hierro! Él entró a Letonia, un país comunista. Una poetisa Letona escribió su experiencia de un sueño en un poema. Yo voy a leerles este poema, traducido por una señora alemana:
Extraños sueños aparecieron.
Anoche un encendedor de linternas me visitó
Con un vestido rojo como las amapolas.
Sentándose frente a mí, él se rió de buena gana
Ante mi asombro.
“Perdóname” –balbuceé,
“¿Cómo es que estás aquí? ¿Cómo entraste?”
–Él respondió:
“Tú debes haberme llamado si yo he venido”.
“Tú vivías en tiempos antiguos” –dije.
“Sí, pero no permanezco allá. Vengo al presente.
Sólo me quedo hasta que en un hogar
Todas las linternas hayan sido encendidas
Cuando llega la noche” –dijo Él.
“¿Pero dónde vives? ¿Cuál es tu nombre?” –pregunté yo.
Mi huésped se rió.
“¡Desde aquellos días de antaño, he tenido muchos nombres!
Digamos que hoy mi nombre es Sai Baba.
Yo vivo más allá de mil y una aguas.
Totalmente ocupado. Tengo una naturaleza tan inquieta.
Voy andando por allí para velar
Por que todas las linternas se enciendan
Cuando llega la noche” –dijo Él.
“No te vayas todavía, por favor, no te vayas todavía,
No me dejes” –le rogué.
Anoche me visitó un encendedor de linternas.
Ese es el papel que Swami ha asumido. Yo estaba hablando acerca de una persona que se ahogaba. Eso es encender una linterna, encender una lámpara. Todos estamos en la oscuridad y debemos encender la lámpara, y dejar que la luz entré. Ese es el trabajo de Swami. Él anda dando vueltas… “¡Oh! ¡Esta linterna no ha sido encendida!” Y así enciende esa linterna, y la otra, y la otra… ¡El amor es la luz!
Ese es el hobby de Swami. Dar devoción, encender la lámpara, traer luz y amor a toda la Humanidad.
Selección de un discurso de N. Kasturi.
Correspondiente al libro: Sathya Sai Baba, Dios en Acción.
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