VISIÓN INTERIOR
Por Sri Madhusudan Naidu.
En esta sección llamada VISIÓN INTERIOR, el Hermano Madhusudan Naidu comparte momentos interesantes y perspicaces de las interacciones de Bhagavan con Sus Estudiantes, Maestros y Devotos. ¡Esta es la verdadera sabiduría directamente desde el sanctum sanctorum más íntimo de la Presencia Divina directa!
Estas son las compilaciones de esas perlas de sabiduría para el beneficio de los devotos.
¡Tu lo dices, pero Yo lo hice!
Cuando Swami visitó la aldea Joy en Enugu, Nigeria, los niños del Ashram presentaron canciones conmovedoras para la alegría de todos.
A partir de entonces, Swami pidió al Sr. Tigrett y a otros que hablaran y felicitaran a los niños por su maravillosa interpretación generosamente.
Eso hizo a todos los niños muy felices.
Sin embargo, poco después, cuando le tocó a Swami hablar, recordando que los niños querían venir a la India, simplemente los invitó a la India para actuar en el Ashram en Muddenahalli. No hace falta decir que todos estallaron en un estruendoso aplauso.
Más tarde, en su habitación, mientras hablaba con los invitados y devotos, Swami comentó: “Miren cuán felices son los niños. ¡Tu dijistes cosas y los hiciste felices, mientras que Yo hice cosas y los hice más felices!
Mientras ustedes elogiaban su desempeño, los recompensé invitándolos a la India. Tu dijiste cosas, pero Yo hice lo que los haría felices ".
Una pequeña declaración de Swami, pero significativa.
En este mundo donde la mayoría mira la difícil situación de los demás, y en el mejor de los casos, pronuncian unas pocas palabras de alivio, Swami hace cosas para aliviarlos de sus sufrimientos.
Su compasión fluye a través de sus acciones y los resultados son eternos.
Swami solía decir a menudo: "El hombre habla mucho pero hace poco, mientras que Dios habla poco, pero hace mucho".
¡El nuestro no es simplemente un Dios de palabras, sino un Dios de hechos.!
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INNER VIEW
By Sri Madhusudan Naidu
¡ You said, but I did.!
When Swami visited the Joy village at Enugu, Nigeria, the children of the Ashram presented soulful songs to the joy of all. Thereafter, Swami asked Mr Tigrett and others to speak and they congratulated the children for their wonderful rendition generously. That made all the children very happy. However, soon after that when it was Swami’s turn to speak, remembering that the children wanted to come to India, He simply invited them to India to perform at the Ashram in Muddenahalli. Needless to say, they all burst into a thunderous applause.
Later in His room, while speaking to the guests and devotees Swami remarked, “Look how happy the children are. You said things and made them happy, whereas I did things and made them happier! While you praised their performance, I rewarded them by inviting them to India. You said, but I did that which would make them happy.”
A small statement of Swami, but a significant one. In this world where most look at the plight of others and at best speak a few consoling words of relief, Swami does things to relieve them of their sufferings. His compassion flows through His actions and the results are everlasting. Swami used to often remark, “Man speaks a lot but does little, where as God speaks little but does a lot.” Ours is not merely God of words, but God of deeds!