MENSAJE DE SAI A CHARLES PENN – PARA TODA LA HUMANIDAD
La misión de ustedes ha comenzado. Esas son mis palabras para ustedes, mis devotos. Cada uno de ustedes tiene que actuar una parte singular y valiosa en esta vida. Solo pueden servirme aquellos a quienes llamo.
Mi misión ha alcanzado ese momento en que cada uno de ustedes tiene trabajo que hacer. Este planeta tiene un propósito en la gran galaxia que lo contiene. Ese propósito se está desplegando ahora ante sus ojos. Les hago un llamamiento a que irradien la bakhti de su interior, para que su invisible fuerza envuelva a todos los que ingresan en la órbita de ustedes. Para ejecutar su parte con éxito, permanezcan siempre centrados en Mí.
Permítanse impartir esa pureza de corazón que tienen en su interior, a todos los seres humanos y a todas las criaturas vivientes, y no busquen los frutos de su propio trabajo.
Esta parte de mi misión se realiza en absoluto silencio. Ustedes son los instrumentos desde los que se derramará mi amor. Estén siempre conscientes de que en el momento en que permiten a su ego descender sobre ustedes, mi trabajo se detiene. Cuando hayan superado su mentalidad negativa, nuevamente se convertirán en mi fuente.
La multiplicación de mi amor se sentirá en el mundo entero. Los he preparado a lo largo de muchas encarnaciones. Los he atraido a Mí. He dado grandes pasos en mi misión a lo largo de esas encarnaciones pasadas. Mi trabajo es incesante, y tampoco el trabajo de ustedes tiene fin.
Sepan que Yo estoy dentro de ustedes y también fuera. No hay diferencia. Líbrense para siempre de los asuntos insignificantes. Ahora, Yo estoy en ustedes y ustedes están en Mí. No hay diferencia. Mi darshan se derramará de Mí y a través de ustedes. Es posible que no se den cuenta de esta constante acción. Sean siempre puros de corazón y de alma, y la humanidad se beneficiará, durante la vida de ustedes, de sus singulares cualidades.
También otros se me unirán en esta misión, cuando los atraiga a Mí. Se aproxima el tiempo en que toda la humanidad viva en armonía. Ese tiempo estará aquí más pronto de lo que esperamos. Antes de que llegue, estén preparados para todo lo que haga falta con el propósito de revelar a cada ser viviente el verdadero propósito de la existencia. No es lo que cualquiera que esté vivo pueda imaginar. No es algo a lo cual podamos tratar de aspirar. Está más allá de toda comprensión. Puedo decir que la magnificencia de su belleza está más allá de todos los sueños. Mientras cada uno de ustedes realiza su silencioso trabajo, Yo los abrazo sobre mi corazón, y a partir de ahora sus almas serán elevadas y sus ojos revelarán mi presencia en su interior.
Digo esto a todos mis devotos, desde la cima de la Montaña del Señor, donde todos los universos se hacen uno. Ocúpense de mi trabajo, mis amados bakhtas. Su aliento llevará el aroma de las flores del Cielo. Su ejemplo será el de los ángeles. Su alegría será mi alegría.
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