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martes, 7 de marzo de 2017

EXPERIENCIAS CON SAI_MI INCREÍBLE SAI - DENTRO Y POR FUERA.


MI INCREÍBLE SAI - DENTRO Y POR FUERA.








Se dice que un libro puede abrir su mundo a nuevas posibilidades. Pero si se trata de un libro sobre el avatar del siglo? Nanditha M Pandith, estudiante de último año en MBBS Navodaya Medical College, Raichur, descubrió un nuevo mundo, a través de una serie de eventos que comenzaron una vez que leyó un libro de Sai. Como delegada de la recién celebrada Reunión de la juventud en Muddenahalli, aquí ella comparte su experiencia y aprendizajes, tanto durante el entro y como fuera de él.


Soy estudiante de ciencias. Estoy estudiando para ser médica y mi mente está entrenada para ir por la lógica y no por el corazón. Pero la única vez que decidí seguir a mi corazón, me dio buenos dividendos, y cambio mi vida. Tuve la bendita oportunidad de asistir a la Reunión Nacional de la Juventud 2016, que se celebró en Sathya Sai Grama, Muddenahalli y fue tan convincente que puedo decir que esos tres días reunidos han cambiado mi vida para mejor, para siempre.


Sathya Sai hace su entrada.



Mi historia con Sai comenzó hace cuatro años en diciembre de 2012 cuando el libro 'Tapovanam' llegó a nuestra casa. Fue regalado a nosotros por uno de los amigos de mi padre. Pero puesto que nadie en mi casa era un devoto Sai, fue relegado diligentemente a un estante en el altar. Nadie se molestó en leerlo.


Casi al mismo tiempo, había llegado a mi casa de vacaciones y estaba angustiada ya que no había tenido buenos resultados en los exámenes. He tenido algunos retrasos (exámenes no aprobados) y estaba muy preocupada, por mi falta de excelencia académica. En pocas palabras, yo estaba deprimida. Todos los días hacia una Pooja y cantaba "Sri Rama Raksha Strotram", pasando la mayor parte de mi tiempo simplemente sentada, no haciendo nada, dejando que mi mente vagara sin rumbo tratando de averiguar dónde había fallado en mis esfuerzos. Mi padre, incapaz de verme así, me dio el libro Tapovanam a mí para una lectura. Él sentía que podría ayudar a no pensar en mis preocupaciones. Incuestionablemente, leí el libro. Al cabo de unos días, mis resultados estaban olvidados y yo entendí que había superado todos mis temas! Di gracias al Dios Rama por sus bendiciones y me olvide totalmente sobre el libro. La vida siguió su camino.


Mi cita con Sai Baba llego de nuevo, y esta vez fue dos años más tarde, en noviembre de 2015, me encontré con una amiga mía, que es alumna del mismo campus y empezamos a hablar acerca de Bhagavan. Por cierto, recuerdo haber leído sobre Él en Tapovanam y hablé con élla acerca de cómo me quedé bastante impresionado con el trabajo realizado por Sai Baba. Nuestra conversación fue un disparador y me intrigó lo suficiente como para volver a leer el libro. Por supuesto, esta vez seguí el camino prescrito de lectura - de jueves a jueves. Mi amiga me había dicho acerca de la presencia sutil de Swami en Muddenahalli y después de la parayana (la lectura del libro), mi deseo de ver a Swami en Muddenahalli comenzó a crecer fuerte día a día.


Después de tres meses de intenso anhelo, finalmente me decidí a confiar en mis padres. Les hablé de cómo deseaba ir a Muddenahalli. Mis padres, preocupados por mi bienestar académico, se ofrecieron a llevarme en junio después de mis exámenes. ¡Estaba destrozada! Se estaba haciendo dolorosa la espera para estar en la presencia de Swami. Me preguntaba cuando Swami se había convertido en una fuerza de conducción en mi vida. Mientras mi mente no encontraba motivó a este deseo profundo, el universo ya había puesto en acción su plan para mí. Me encontré con mi amiga Sai, una vez más. Y esta vez, me informó acerca de la Reunión Nacional de la Juventud en Muddenahalli, que tendría lugar en mayo. La noticia fue un soplo de aire fresco. Me aferré a ella de por vida e inmediatamente yo me registre como delegada, esperando ansiosamente por el fatídico día de mayo.


Pero la mente, como se suele decir, es una gran embustera. A medida que los días pasaban, empecé a preguntarme si realmente debería ir. Mis exámenes se acercaban y me preguntaban si los días perdidos en mi preparación, podrían pasar factura en mi rendimiento. Pero, por suerte, el mejor sentido prevaleció y decidí seguir a mi corazón y asistir a la reunión. Sin más preámbulos, pronto me fui de Raichur para llegar Muddenahalli.


La cita divina.


Una vez que llegué Muddenahalli, las cosas tomaron un giro para mejor. He completado los trámites de registro, y me encontré con otro delegado. Ella tuvo la amabilidad de acompañarme a mi habitación asignada recientemente. Mientras caminábamos hacia el alojamiento, recibimos información de los voluntarios, que Bhagavan estaba en  camino. Mi corazón dio un vuelco, literalmente! No había esperado ver a Swami en el primer día de mi llegada, y aquí estaba a minutos de realizar mi sueño de muchos meses. Pero, por desgracia, no estaba vestida apropiadamente de acuerdo con las regulaciones del ashram. Yo acababa de llegar y no había tenido tiempo suficiente para cambiarme. La voluntaria señora me pidió que cambiar rápidamente a un vestido más adecuado para el Darshan. Mi nueva amiga se ofreció a ayudarme también, pero yo estaba en duda. No quería dejar pasar la oportunidad. ¿Qué pasa si Swami pasa en el momento en que me cambio y vuelvo? Por lo tanto, me escondí detrás de la multitud de delegados, devotos y voluntarios para robar una mirada a Swami. Debo confesar, que era un poco incómodo. Era un nuevo lugar y yo no conocía a nadie. Pero la madre divina probablemente me había detectado por las molestias. Después de que Bhagavan llegó, como para calmar mis preocupaciones específicamente, Él amorosamente consoló a todos y nos dijo a todos que no dudemos, ya que era la casa de nuestra madre! Era de hecho, nuestra Madre Sai. Esta fue mi primera experiencia del amor de Swami.


Él escucha nuestros pensamientos más íntimos.

Al igual que todos los devotos Sai, que son bendecidos para experimentar la omnipresencia, omnisciencia y la omnipotencia del Señor, yo también tuve la suerte de hacer y deshacer los muchos caminos a Dios - durante mi estancia allí, y en adelante.
Como yo provenía de Karnataka, siempre había sabido acerca de la escuela en Alike. Pero también me había preguntado siempre por qué no había muchos más centros educativos basados en valores, en el estado. Y mientras me integraba a través de los procedimientos del primer día de la reunión nacional de la juventud, este pensamiento cruzó mi mente otra vez. Y en momentos, Sri Narasimha Murthy habló sobre todas las nuevas instituciones que habían surgido y surgirán bajo las instituciones Loka Seva. Mientras mi mente guardo este caso como una mera casualidad, ¡sucedió otra vez!


Al estar en compañía de tan incondicionales espíritus, mi corazón deseaba saber cómo yo también podría recorrer el camino de Sai Baba. Y justo en ese momento, el señor Murthy  habló sobre que el camino hacia Dios es sólo a través de la entrega, y mostrando amor y compasión a los demás! De inmediato supe que estaba en presencia de Dios. Esto no fue una coincidencia. Fue una Sai-incidencia.


Mientras asistía a la reunión de jóvenes, que era sólo un pretexto para venir a Muddenahalli, y ver a Swami para mí, me ofreció más que eso. Yo estaba al tanto de tales conversaciones y discursos espirituales tan ricos, que dejó una marca indeleble en mi personalidad. Escuchando los discursos de Bhagavan me hizo comprender la importancia de la oportunidad que me había concedido y decidí empaparme en la extravagancia espiritual, tanto como pude.

Mi madre siempre me había reprendido diciendo que era mi ego lo que siempre me trajo abajo. Aunque nunca me preocupé por ello antes, escuchar al Padre Charles Ogada hablar de cruzar el sentimiento de "yo" como la esencia de Cristo ayudó. Mis lecciones de vida se hicieron más claras.

Mi corazón saltaba de alegría. Había recibido más de lo que había imaginado y esto fue sólo la primera sesión del primer día! Mientras estaba sentado recordando cómo acabé en Muddenahalli, en el regazo de mi Madre Sai, más cucharadas de amor me esperaban. En la sesión de la tarde, el padre Charles habló sobre cómo era Swami mismo quien elegía quienes  acudían a él! Fue entonces cuando se me ocurrió que Swami había llegado por primera vez a mi vida bajo la apariencia del libro Tapovanam. Esta es la forma en la divinidad desciende a la humanidad. Mientras me deleitaba con este pensamiento, mi mente se levantó otra vez, recordándome cómo no podía subir, lastrado por mis karmas. Me sentía culpable por algunas de mis obras. Sentí que estaba fallando a Swami. Aquí fue Swami, quien  por su amor me había dado una hermosa oportunidad, pero de repente me sentí como si no lo mereciera. Recé a Swami, en mi corazón, que me perdone y le inste a purificarme. Le escribí una carta, rogándole que me deshiciera de todos estos sufrimientos.


Una vez más, y sin coincidencias, una respuesta divina me esperaba. El padre Charles, volvió a subir al podio, y a instancias de Swami, habló sobre el zoroastrismo. Habló sobre el significado del fuego y dijo que el fuego siempre purifica. Así como cuando pones oro impuro en el fuego, sale puro, la divinidad es pureza y para sacar esa divinidad en nosotros, pasamos por tiempos difíciles también. Él habló de cómo Swami nos llama "Bangaru" la mayoría de las veces y explicó cómo cuando el oro se mezcla con aleaciones e impurezas, el Orfebre lo pone en el fuego. No es castigar el oro. Se hace simplemente para purificarlo. "Por supuesto durante ese tiempo, el oro estará llorando como todos lo hacemos cuando Swami nos purifica, pero es el acto de Su amor. Cuando nos haga pasar por el fuego santo, no tengamos miedo. ¿Sabes cuando el fuego nos calienta, lo rechazamos, lo negamos y lo combatimos? Esto es sufrimiento. Pero cuando nos entregamos a Él, la purificación se vuelve dulce, y los sufrimientos se convierten en otra cosa ... pura felicidad ". Estaba llorando cuando lo oí. Swami había respondido una vez más a mi duda.


Me senté a Darshan con la carta en mi mano, rogando fervientemente que Swami me la aceptara. Fue un día especial para mí - era el cumpleaños de mi madre. Pero mi Sai Maa lo hizo aún más especial. No sólo aceptó la carta, sino que dijo "Sari Pothundi", asegurándome que todo estará bien. En cuestión de segundos, sentí que sobre mi ser descendía la paz. Las vibraciones divinas que sentí cuando Swami estaba caminando entre nosotros, está más allá de las palabras. Nunca me había sentido tan tranquilo y sano; Ni siquiera en los templos y otros lugares de culto. Estaba lleno de alegría y lloré en mi corazón. Yo estaba feliz más allá de toda medida.


El segundo día de la Reunión fue otro día lleno de acontecimientos para mí. El tema del día fue "Ideales del Ramayana para los tiempos modernos". El Señor Rama era mi Ishta Devta (Dios de elección) y por lo tanto amé el Ramayana. Las conversaciones fueron muy interesantes y llenas de lecciones. Aprendí a evitar la tentación de la negatividad y cómo disiparla. Una persona se debilita cuando se enfrenta a la tentación y la tentación se vuelve mucho más fuerte, explicó.


Mi corazón planteaba preguntas que nunca había tenido antes. Me encontré preguntándome cuál era el propósito de mi vida. El siguiente discurso de Su gracia Shubh Vilas Das Prabhu me ayudó a encontrar la solución. Él nos dio los cuatro L - vivir(live), aprender(learns), amar(love) y legado(legacy) para vivir. "Para lograrlo, necesitamos el 6 C - elección(choice), desafío(challenge), compromiso(commitment), conexión(connection), compostura(composure) y certeza(certainty)", dijo.


Bocados de amor.


Soy una entusiasta confesa. El primer día de la Reunión de alguna manera yo no conseguí el prasadam. Fue Ladoo. Yo estaba quejándome a mi amiga y para nuestra sorpresa, nos dieron Ladoo a cada una cuando entramos en el comedor. Me encanta el bisibele (arroz dal), y era nuestro menú de la cena. Swami no sólo estaba alimentando mi alma, Él se encargó de mis gustos también, al igual que lo haría una madre!


A estas alturas, ya me había acostumbrado a que Swami respondiera a mis peticiones mundanas. Y como un niño, una vez más le pedí a Swami que me ayudara con mi dulce. Por lo general, comer chocolates, de 5 estrellas para ser más preciso, cuando me siento cansada. Quería unos chocolates, pero no tenía ninguno. La sesión de la tarde fue una prueba de Ramayana, y se llamó 'Concurso Chocolate '. Cualquier persona que respondería a las preguntas correctamente ganaría uno de 5 estrellas! Y por la gracia de Swami, terminé el día no con uno, dos o tres, sino siete chocolates 5 estrellas.


Pero Su gracia es una adicción tan divina, que nunca sacia nuestro hambre espiritual. Por la noche, me senté para el Darshan con mi nueva posesión, el libro "Sookshma Sathya Sai, La base invisible de lo visto" de Hiramalini Seshadri. Esta vez también un libro me llevó más cerca de mi Sai interior. Cuando Swami caminaba por la alfombra roja, todos los devotos se reunieron a ambos lados de la alfombra, esperando sus bendiciones, para dar cartas, etc. Yo era uno de ellos, sosteniendo este libro. Swami tocó el libro y me bendijo. Una vez más, fui transportado a reinos más allá de la imaginación, empapados en Su amor.


Si los dos primeros días fueron demostraciones de cómo rendirse, el tercer día fue una lección práctica de rendición para mí. Mientras Swami continuaba atendiendo a mis papilas gustativas - el desayuno de la mañana fue Pongal, mi favorito - tuve un hermoso sabor de su omnipresencia también.


El NYM había llegado a su fin y tuve que volver a la estación de autobuses de la ciudad de Bangalore para tomar mi autobús a Raichur.


Uno de los voluntarios felizmente accedió a llevarme a Chikkaballapur. Me gustaría mencionar aquí cuán cariñosos y bondadosos fueron los voluntarios. Los que nos sirven comida, o los que nos ayudan con nuestras actividades cotidianas, cada voluntario aquí fue realmente amoroso y sentimos que era su deber servirnos a todos nosotros. Me emocionó profundamente su amor. De Chikkaballapur tomé un autobús a la estación de autobuses de la ciudad de Bangalore. Mientras que todo hasta ahora había sido según el plan, las cosas tomaron un giro para peor pronto. Estaba lloviendo mucho cuando llegué a Bangalore. Con un montón de dificultades, me las arregle para reservar un asiento en el autobús de las 9 pm que sale a mi ciudad natal. Pero en todo este diluvio, me olvidé del tiempo. En el momento en que me di cuenta, me quedaban sólo 10 minutos para llegar a la parada del autobús y ninguno de los conductores de taxi acordaron conducir a la parada designada debido a la fuerte lluvia.


Sin saber que hacer, empecé a llorar. Con el nombre de Swami de mis labios, de alguna manera logre arrastrar el equipaje y caminar a la parada de autobús, sólo para no ver ningún autobús allí. Estaba destrozada. Había perdido el autobús. Me quedé atrapada bajo la lluvia, solo, en medio de una parada de autobús desierta. Lloré aún más fuerte, llamando a Swami para que me ayudara. Sólo Él podía, y así lo hizo. Un buen samaritano se acercó y me dijo que dejara de llorar y verificara la hora de salida en mi billete de autobús. Tomé mi boleto para comprobarlo, sólo para darme cuenta que el autobús iba a salir a las 9.50 pm. Yo había llegado a la parada antes de tiempo! Cuando me volví para darle las gracias a esta persona, no estaba en ninguna parte. Traté de localizarlo, pero como dije, era una parada desierta y él simplemente no estaba allí.


Me di cuenta de que era pura gracia de Swami. ¿Quién era esa persona que apareció de la nada para ayudarme? ¿Dónde desapareció de repente? Aunque quizás nunca encuentre las respuestas a estas preguntas, sé en mi corazón, que era Swami el que estaba haciéndolo. Me hizo leer mal los horarios de los autobuses, me hizo pasar por dificultades e incluso llegó a mi rescate, sólo para enseñarme la lección de rendición, el camino a él.


Amor... Sairam


Nanditha Pandith

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