Carta de Semma M. Dewan sobre su reciente viaje a Parthi. Sai Ram.
El Señor de Parthi retorna como el niño Sai.
Como siempre, el viaje a Parthi fue maravilloso. Nada ha cambiado realmente. La presencia de Swami se siente a todo lo ancho. Impresiona ver el alcance que han tenido los mensajes de Swami. Gracias a la silenciosa presencia de cantidad de devotos, mucha gente ha podido encontrar paz y escuchar la palabra de Dios, en esta época tan dura. En la gente sigue brillando una sonrisa; su devoción está presente en cada Darshan. Todos han asumido el papel de hijos valientes de Bhagavan, practicando la enseñanza y viviendo la verdad. Recibí casi todos los mensajes durante el Darshan vespertino, como si Él estuviese ahí sentado en su sillón, bendiciendo a sus devotos. Me sentí invadida por una ola de amor, por lo que, al volver a mi recámara después de Darshan, sentía ansiedad por tomar un papel y poner la energía de su amor en palabras. ¡Qué afortunada es la vida cuando se está en Dios! Mucho me pregunté antes de venir cómo encontraría Parthi? Para mi sorpresa, descubrí la misma majestuosidad, paz y amorosidad de siempre.
De inmediato se disiparon mis temores, y me sumergí en el cobijo del beatífico templo que nuestro amado Señor construyó para nosotros y para los muchos hijos que aún están por llegar. Un manto de flores enmarcaba el cuerpo de nuestro Amado. Del Sai Samadhi se expandió una nube de Bhakti que saturó todo Prashanti Nilayam en oleajes de amor y de luz de Conciencia Suprema. El corazón de uno queda palpitante tras tocar el Samadhi donde reposa el cuerpo de Sai y donde la Conciencia Suprema permanece eternamente despierta.
La palabra de los Vedas resuena desde la loza, y el aroma de las flores se esparce cual si fuese el divino aliento de Sai. Dios reposa para que nosotros nos activemos en la misión de la verdad que Él vino a encarnar. Si pones la mente en sus divinos pies, y tu corazón en su mano al tocar el Samadhi, recibirás su guía y se te revelará el trabajo que deberás realizar ahora y en lo futuro.
Muchos siguen recibiendo su omnisciente Darshan, pues es sólo su cuerpo el que permanece silente. Me percato de que hoy por hoy Sai vigila más aun la mente y el corazón de sus devotos. La casa de Dios permanece abierta a todos como siempre. Él nos sigue llenando de gracias y protección en los momentos de pesar. Donde está el ojo del devoto, ahí está Bhagavan. Si dudas de tu devoción, habrás perdido todo. Baba apareció en varias ocasiones, y lo pude ver bendiciendo a muchos sin que ellos lo supieran. No más peleas por ganar la atención del Señor. Ha comenzado el tiempo en que cada persona debe luchar por mantener su fe. Es la unión de todos lo que preservará la experiencia del amor de Dios. El Señor trabaja mejor en el silencio. El amor se transmite en el silencio, donde la verdad no puede ser entorpecida. Tenemos que comprometernos en el trabajo divino hasta dar nuestro último aliento, y compartir sin jactancia ni arrogancia la dicha que obtengamos de ello.
No debemos jamás medir nuestro esfuerzo ni aspirar al éxito. Debemos dar curso al trabajo olvidándonos del ‘yo’, plenamente conscientes de Dios. -Él cuenta con millones de manos en la tierra de Parthi. Niños, hombres y mujeres deben abocarse a ayudarse los unos a los otros en medio de su tribulación.
Entre algunas lágrimas de pesar, brillaron sonrisas que evocan la presencia del Señor entre nosotros. Parthi no ha cambiado para nada. Bhagavan está presente. En nosotros se está dando el cambio; estamos entendiendo que nosotros somos las manos de Sai. Es, si acaso, el lado hermoso de la partida de Swami. Veo el advenimiento de la Edad de Oro, y que la inmensa mayoría de devotos no desea desperdiciar ni una sola gota del dulce amor que Bhagavan puso en su lengua. Los hijos de Dios se unen ahora para formar el torrente de amor puro e incondicional, para edificar montañas de fe. Los hijos de Sai lloran océanos de Bhakti para que el mundo obtenga la vida y mensaje de amor de nuestro amado Señor.
¿Quién dice que la vida de Sai llegó a su fin? ¡Acaba de comenzar! El escenario de Puttaparthi en el que el carismático Señor bailó al son del Bhakti del devoto se disipó, mas la verdad y el mensaje que subyacen a lo que fuera dicho escenario, y el amor divino presente en cada interacción se hizo evidente…, tan evidente que los hijos de Sai no deben desperdiciar ni un momento de lo mucho que han recibido. El mundo está por recibir la gracia de Dios, jamás experimentada o conocida.
Carta escrita por Seema M. Dewan
(Trad. de Cinthia De Gortari)
OMSAIRAMMM...
..............................................................................................................................................................
A Letter Written by Seema M. Dewan About Her Recent Trip to Parthi
The Lord of Parthi Returns in the Child of Sai
- A Letter Written by Seema M. Dewan About Her Recent Trip to Parthi Sai Ram, As usual the trip to Parthi was wonderful. Nothing has really changed. Swami's presence is felt far and wide. It is amazing to see how far and wide Swami's messages have reached. Thanks to the dedication of a lot of pure-hearted and silent devotees, many have received solace and the word of the Divine in this hard period. People still glowed with smiles and put forth their devotion during each Darshan. All have taken upon themselves the role of being Bhagwan's brave children that would at this moment live His teachings and practice His truth. I received most of the messages during evening Darshan as He still sat on the chair blessing His beloved devotees. I would feel the wave of love fill my being and of course as I reached the room after Darshan I desperately looked for paper to translate the energy of love into the word of truth. How blessed is this life with God. I often wondered what Parthi would be before I left. To my surprise, it stood with the same grandeur, the same peace, and the same love that it had stood on before. My fears were immediately put to rest and I plunged myself into the blissful abode that our dear Lord has built for us and for His many children that are yet to come. The bed of flowers cradled the body of our Beloved. A white fog of Bhakti emanated from the Sai Samadhi enveloping all of Prashanti Nilayam in the waves of love and the brilliant light of Supreme Consciousness. You can still experience the pitter-patter of the heart upon touching the Samadhi in which the body of Sai lays to rest and the Supreme Consciousness remains eternally awake. The word of the Vedas resounds from the stone and the fragrance of the flowers enter within as the breath of Sai. God is laying to rest only to make us active in the mission of truth that He came to live. If you place your mind upon His Divine Feet and your heart in His Hand, as you touch the Samadhi you shall receive His guidance within which your work for the present and the future shall be revealed. Many continue to receive His Darshan in the omniscience. He is only silent in the body. I see He has become more vigilant in the minds and the hearts of those devoted to Him. The house of God is still open to all as it was before. He still fills all with grace and continues to protect them in their moments of despair. Wherever there is the eye of Bhakti that is where Bhagwan will be seen. If you doubt your own devotion then all will be lost. Baba appeared several times and I witnessed Him blessing so many without their knowing. The fight for the Lord's attention is over. There is a new beginning where each one is fighting to keep the faith and compromising with each other to continue to experience the love of God. The work of God is best when it is silent. Love travels in that silence and truth remains unhindered in it. Until our last breath we have to immerse ourselves in His work and the bliss that we derive from it must be shared with no pride and no attachment to it. We must not measure our work or chase its success. The work must emanate from us in forgetfulness of the I yet it should be fully aware of the Divine. God's million hands are evident in the land of Parthi. Each child, every man, every women is extending themselves to help another in his grieving. Amidst the tears of pain there were the smiles of reminiscing the Lord's life with us.Parthi has not changed. Bhagwan is still present. But we are beginning to change and see ourselves as the Hand of Sai. That is the most beautiful part of Swami's leaving the body. I see the Golden Age to come. I see that most do not wish to waste a drop of Bhagwan's nectarine love that has been placed on their tongues by our beloved Baba. The children of God are coming together in order to build the river of unconditional and pure love. The children of Sai are coming together to build the mountains of faith. The children of Sai are weeping the oceans of Bhakti in order for the world to receive the life and message of our beloved Lord. Who tells that the life of Sai has ended? It has just begun. The play of Puttaparthi in which the Lord in His charismatic way danced to the tunes of Bhakti with His devotees has faded, but the true picture of truth the true message behind all the games, the Divine love behind all the interactions has become clear... so clear that the children of Sai shall not waste a moment of what they received. The world is about to receive the Grace of God that they have never ever experienced nor contained before.
A letter written by Seema M. Dewan
OMSAIRAMMM...
OMSAIRAMMM...
CENTRO SAI HISPANO...
Clickear logo para recibir actualizaciones de Centro Sai Hispano
Click logo for updates from Sai Hispanic Center
No hay comentarios:
Publicar un comentario