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domingo, 14 de enero de 2018

SAI SATSANG_Yo soy la voz, la voz de la conciencia interior.




Yo soy la voz, la voz de la conciencia interior.


sairam,


En una entrevista para traductores globales del equipo de Uvacha el 24 de noviembre de 2016; uno de los traductores busca orientación para superar las distracciones durante la meditación.


Y esto es lo que dijo Swami:


Pregunta: Durante la meditación, hay un flujo constante de pensamientos que nos interrumpen y confunden, alejándonos de la meta. ¿Podrían ayudarnos a superar estos bloqueos?


Swami: La mente es como un niño; le gusta parlotear. Si lo llamas y dices: "Ven y siéntate cerca de mí". Cállate, 'no se quedara tranquilo. Continuará y seguirá hablando. ¿Qué hace la madre? Ella hará su trabajo y no le prestará atención al niño porque es importante que termine su trabajo. Si se sienta y escucha toda la charla, no podrá hacer su trabajo.


Cuando te sientas a meditar, estás llamando a la mente, ¿y qué le estás diciendo a la mente? "Quédate callado". Mientras más le diga que se calle, más hablará. Entonces, ¿Qué haces? Deja de prestar atención a su charla. Enfócate en la experiencia que viene hacia ti. Después de un tiempo, se cansará de hablar y se irá, y hará otra cosa.


Si no le prestas atención a un amigo, ¿vendrá y se sentará cerca de ti y te seguirá hablando? No, se levantará y se marchará, porque no estás prestando atención. No prestes atención a la mente los pensamientos vendrán; no les prestes atención, no te involucres en ellos. Solo permite que la charla de la mente continúe como ruido de fondo y trata de concentrarte en la experiencia.


Cuando Dios habla, la paz descenderá sobre ti de inmediato; cuando la mente habla, es 'pedazos, partes piezas'. Cuando Dios habla, es una voz que suena dentro; cuando la mente habla, es ruido - confusión.

Por lo tanto, espere a que el ruido disminuya; espere a que la mente se canse y, cuando la mente piense: "Esta persona no es mi amiga". ¡Él no me presta atención! No debería estar aquí, 'desaparecerá'. Hasta entonces, tienes que persistir. ¿Qué hace la mayoría de la gente? Esperan resultados en un momento y, en el momento en que hay un poco de confusión, se levantan y se van. Ese no es el camino. Cuando siembras una semilla, no esperas la planta al día siguiente. ¿Sigues excavando para ver si la semilla está germinando o no? No, nunca germinará. Tienes que tener paciencia.


Por lo tanto, la confianza en lo que está haciendo y paciencia para esperar los resultados - ambos son muy importantes para el progreso espiritual. Son como dos piernas, que le ayudará a caminar. Con una pierna, sólo se puede cojear; sin piernas, no se puede mover - pero, con dos piernas estables: una, la fe de que lo que está haciendo es para su bien - que es para la paz que viene con la comunión con Dios; dos, la perseverancia - que tomará tiempo y hay que seguir trabajando hacia su objetivo y no renunciar a mitad de camino.


Hay mil millones de personas en la Tierra. ¿Cuántas incluso quieren sentarse y pensar acerca de Dios? Entre todos ellos, al menos usted está tratando de pensar en Dios, tratando de comunicarse con Dios. Habrá un poco de dificultad - debe enfrentarlo y superarlo. Toma mi palabra; deja de prestar atención a la charla de la mente; déjala ser. Después de algún tiempo, cuando haya dejado de ser su amigo, cuando no le de atención a lo que dice, se cansará y se mantendrá tranquila - a continuación, se podra escuchar la voz.


Muchos de ustedes meditan y esperan que yo aparezca de una manera particular o que hable de una manera particular: estas son expectativas equivocadas. Estoy en esta forma ahora para sacarte de esa mentalidad. Yo soy la voz, la voz de la conciencia interior. No soy una forma; Yo no soy un nombre; No soy una figura; Soy un sentimiento. Conéctate con ese Swami, esa conciencia, que es el verdadero Swami. Comprende lo que dice. Al igual que los yoguis de tiempos pasados, entenderán cuando hable. No hablo un idioma, no se necesita traducción, nada en absoluto. Simplemente sabrás que es Dios cuando habla.


Permitan que la mente se calme. Cuando se lanza una piedra en el agua,  se forman ondulaciones y tomará un tiempo para asentarse. Permitan que la mente se calme. Dejen que los pensamientos vengan y vayan como las ondas van y vienen. Sólo veanlos, no se involucren con ellos. Después de algún tiempo, la mente se cansará y se calma. Puede suceder en un minuto para algunos, en unos pocos días para algunos otros, tal vez semanas para otros más, tal vez meses, o incluso años para otros - pero, no se den por vencidos.


Cuanto más se acerquen, será más empinado y pronunciado, será mas difícil. Es fácil elegir ir a los bhajans un día, cantar un bhajan, regresar y continuar como lo hizo sin preocuparse por el resto, pero eso no lo llevará a ninguna parte. Cuando subes a una montaña, cuando te acercas a la cima, la escalada será más dura; el esfuerzo será mayor. Sin embargo, si te das por vencido y vuelves a bajar, todo el esfuerzo que has realizado hasta ahora se desperdiciará. Ten paciencia con la mente La mente también es una herramienta dada por Dios, pero debes saber cómo mantener la mente en silencio. Para hacer eso, si parlotea mucho y te distrae, no le prestes atención. Aprenderás, a medida que pase el tiempo. Tener paciencia.

...BABA.



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I am the voice, the voice of the conscience within.



Sairam,


In an interview to global translators of Uvacha team on 24 November 2016; one of the translators seeks guidance on overcoming distractions during meditation.


And here is what Swami said:


Question: During meditation, there is a constant flow of thoughts that interrupt and confuse us, keeping us away from the goal. Could You give us some help in getting past these blocks?


Swami: The mind is like a child; it likes chattering. If you call it and say, ‘Come sit near me. Be quiet,’ it will not be quiet. It will go on and on talking. What does the mother do? She will be doing her work and will pay no attention to the child because it is important for her to finish her work. If she sits and listens to all the chatter, she will be unable to do her work.


When you sit for meditation, you are calling the mind – and what are you telling the mind? ‘Keep quiet.’ The more you tell it to keep quiet, the more it will talk. So what do you do? Stop paying attention to its chatter. Focus on the experience which is coming to you. After some time, it will become tired of talking and will go away, and do something else.


If you don’t pay attention to a friend, will he come and sit near you and keep talking to you? No, he will get up and go away, because you are not paying attention. Don’t pay attention to the mind. Thoughts will come; don’t pay attention to them, don’t become engaged in them. Just allow the mind’s chatter to go on as noise in the background and try to concentrate on the experience.


When God speaks, peace will descend on you immediately; when the mind speaks, it is ‘pieces, pieces, pieces’. When God speaks, it is a voice that rings within; when the mind speaks, it is noise – confusion.


Therefore, wait for the noise to subside; wait for the mind to get tired – and, when the mind thinks, ‘This person is no friend of mine. He pays no attention to me! I should not be here,’ it will go away. Until then, you have to persist. What do most people do? They expect results in a moment and, the moment there is a little confusion, they get up and go away. That is not the way. When you sow a seed, you do not expect the plant the next day. Do you go on digging to see if the seed is germinating or not? No, it would never germinate. You have to have patience.


So, confidence in what you are doing and patience to wait for the results – both are very important for spiritual progress. They are like two legs which will help you walk. With one leg, you can only limp; without any legs, you cannot move – but, with two stable legs: one, the faith that what you are doing is for your good – it is for the peace that comes with communion with God; two, perseverance – it will take time and you must continue to work towards your goal and not give up half-way.


There are billions of people on Earth. How many even want to sit down and think about God? Amongst them all, at least you are trying to think about God, trying to commune with God. There will be a little difficulty – you must face it and get over it. Take My word; stop paying attention to the chatter of the mind; let it be. After some time, when you have stopped being its friend when you are paying no attention to what it says, it will get tired of itself and will keep quiet – then you can hear the voice.


Many of you meditate and you expect Me to appear in a particular way, or talk in a particular way – these are wrong expectations. I am in this form now to get you out of that mind-set. I am the voice, the voice of the conscience within. I am not a form; I am not a name; I am not a figure; I am a feeling. Connect to that Swami, that consciousness, which is the true Swami. Understand what it says. Like the yogis of times past, you will understand when it speaks. No language spoken, no translation needed, nothing at all. You will just know that it is God when it speaks.


Allow the mind to settle down. When you throw a stone in water, ripples will form and will take a while to settle down. Allow the mind to settle down. Let the thoughts come and go as ripples come and go. Just watch, don’t engage with them. After some time, the mind will tire and will calm down. It may happen in a minute for some, in a few days for some others, maybe weeks for yet others, maybe months, or even years for others – but, do not give up.


The closer you get, it will be steeper and steeper, it will be tough. It is easy to choose to go to bhajans one day, sing a bhajan, come back and carry on as you were without bothering about the rest – but, that is not going to take you anywhere. When you climb a mountain, as you are approaching the peak, the climb is going to get tougher; the effort will be greater. However, if you give up and go back down, then all the effort that you have put in so far will get wasted. Have patience with the mind. The mind is also a tool given by God but you have to know how to keep the mind silent. To do that, if it chats too much and distracts you, do not pay attention. You will learn, as time passes. Have patience.


...BABA.


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