Yo te he elegido:
Tú has estado siguiéndome por vidas y vidas. Has sido probado y clasificado en este Universo, para convertir al planeta Tierra en una tierra espiritual.
Tú tienes tu propia vida y elegiste el camino de SAI. Yo he escrito para ti tu propia historia. He planeado caminos y rutas. Todo lo que sucede es por Mi voluntad. Nada de lo que tú llamas casualidad tiene sentido.
Una vez que has venido a Mi presencia, ya no puedes volver a tus hábitos anteriores, has de dar vuelta a tu vida de abajo para arriba. Tú has cambiado, has evolucionado. Ya no disfrutas llevando a cabo tus viejos hábitos.
Los senderos de Dios están dibujados en el plano de tu vida. Ponte a trabajar, ¡manos a la obra! Soy la energía que te levanta cada mañana y soy el cansancio que te duerme por la noche.
Dedica cada día totalmente a la realización de tu DIOS INTERNO. Descubre el secreto de la felicidad, toma conciencia de lo importante que es vivir cada día con la atención puesta en tu interior.
Levántate temprano en la mañana, descubriendo los primeros rayos del sol que aún no ha salido. Da gracias a Dios y dedica el primer momento del día a la oración, a restablecer la comunicación Conmigo, a reafirmar Mi presencia en tu corazón. Busca siempre la serenidad y la frescura de la mañana.
Es importante que dediques tu atención entera a Dios, durante ese rato que media entre el momento en que te levantas y aquel en que desayunas. No importa la cantidad de tiempo, lo que importa es la concentración y la profundidad. Tú no tienes idea de cómo cambia el transcurso de ese nuevo día.
Ten fe en tu tiempo interno, pues lo que siempre es cierto es lo que dice tu corazón, no lo que dice tu mente.
Duerme sólo lo necesario, no pierdas el día entero dormitando, hazlo sólo cuando estés cansado. No confundas cansancio con pereza, son dos cosas diferentes. Si tú te recuestas y no puedes dormir, entonces levántate y haz algo útil hasta que el cansancio te acoja. De nada sirve dar y dar vueltas en tu cama, mientras tu mente no encuentra un solo punto de estabilidad. Que el dormir no se transforme en un pasatiempo.
Comer significa satisfacer el hambre, no llenarte el estómago de productos impuros. Lo mejor es comer frutas, verduras, leche y todo tipo de alimentos vegetales. La carne y los huevos no son muy buenos. Las bebidas alcohólicas hacen mucho daño. Es un vicio, al igual que el fumar.
La energía del cuerpo debe ser recargada, no sólo durmiendo y comiendo. También tienes que alimentar tu cuerpo con energía espiritual. El Alma no se alimenta de proteínas sino de vibraciones. Debes abrir ese camino hacia dentro de ti. Déjame ser siempre el motivo de cada acción. Haz de ofrecerme todo lo que realices, pues el fin último siempre seré Yo.
Contrólate constantemente. Vigila cada pensamiento, cada palabra y cada acción. Sólo tienes que pensar cada acto y realizarlo siendo plenamente consciente de él.
Tus palabras han de ser justas, precisas y nunca incomprensibles. Debes expresarte correctamente cuando intentes decir algo. Esta claridad evitará todo tipo de confusiones.
No pierdas el tiempo en trivialidades, en conversaciones vacías que sólo desperdician energía. Ocúpate de avanzar, ya que el tiempo que tienes aquí en la Tierra se acaba.
Haces bien en no concurrir a esos lugares artificiales, creados por el hombre para la distracción de sus sentidos. Es falso, no tiene razón de ser, Yo no lo deseo para ti. Busca mas bien un lugar tranquilo, si es posible, en contacto con la naturaleza. Un sitio donde puedas llenar tus pulmones con aire puro.
Permanece tranquilo. No te dejes abatir por los vaivenes de la vida, pues son como las olas que vienen y van, que se forman y se deshacen. Cuando sientas que eres débil, pídeme ayuda, no te dejes vencer. Has de ser tu mismo. Búscame siempre, conozco tus pensamientos. Sé constante. Esto te ayudará a entrar en el camino de SAI.
Vienes aquí a la Tierra para conocer tu verdadero SER, para volverte consciente de Mi presencia en tu corazón. Tú, chispa divina, trozo de Mi corazón, sigues tu rumbo y no terminas hasta llegar a DIOS. Más allá de Mí no hay nada. Dios es todo, aquí y en todas partes.
Si Yo te creé fue sólo para amarte y ese es Mi único objetivo. Ya lo sabes, la ignorancia no ha de atraparte con sus mentiras.
En verdad, tú no mueres, ni naces, son sólo períodos, ciclos aquí, en la Tierra. Terminas una vida, pero si no has aprendido lo suficiente, has de volver una y otra vez, hasta que te des cuenta de tu realidad, de que tú eres UNO con DIOS. Sólo muere tu cuerpo, se desvanece y vuelve al polvo.
Tú sabes bien que todo esto es transitorio: tus amigos, pareja, e incluso tus padres. No te apegues a nadie. Vive libremente. Solamente ámalos, no los poseas. Ama con libertad, con verdadero Amor, con el deseo de que el otro pueda mejorar, evolucionar y seguir su camino.
El Amor es Amor, y no hay nada que se le parezca. El Amor no se elige, “SE SIENTE”; no se descubre ni se investiga, “SE SABE”. No se confunde ni se duda, “SE TIENE CERTEZA”. Y todo, porque es verdadero Amor.
El Amor que sólo puedes encontrar en tu interior. El verdadero Amor que tú no puedes exigir, si no estás dispuesto a dar todo de ti, el Amor que no puede ser hallado en la superficie, sino en la profundidad de las mareas, en el fondo de un alma que tú amas.
Dios vive en tu corazón, en el corazón espiritual que se encuentra ubicado en el centro de tu pecho. Tú no puedes alejarte de Él y acercarte, pues tú mismo eres Él, ésa es tu propia realidad.
Hay una manera de “acercarse” a Dios: cierra tus ojos y sólo piensa en Él. Escucha tu respiración y llena tus pulmones con aire. En cada respiración pronuncia el nombre de SAI, en cada exhalación nuevamente nombra a SAI. La constante repetición de este Nombre, automáticamente trae la Forma, la Presencia. La capacidad de sentir a Dios en ti, es la más preciosa virtud que todo ser puede poseer.
Yo he venido para reintegrarte a la senda del Dharma y encaminarte por la devoción. Un verdadero devoto es aquel que sabe esperar sin desesperar. Es aquel que corre en ayuda de un necesitado. Sé buen devoto, pues Yo te he elegido especialmente.
Existe un secreto que te liberará de la ilusión: “LA VERDAD”. La Verdad todo lo protege, la Verdad es Dios, no sólo un valor humano, como tú crees. Cuando tu dices la verdad, hablas a Dios. Lo tienes en tus propios labios. Yo vengo a revelarles la Verdad.
No te desanimes, únicamente debes seguir el camino de la Rectitud y sembrar tu vida con Amor. No existen barreras para ti, sólo aquellas que construyas con tu mente. El camino es simple si lo haces simple. Es difícil, si lo haces difícil. Es imposible, si así lo crees y no tienes fe. Tú construyes tu propio mundo. Es tu voluntad. Así sucede con todo.
Haz siempre el bien sin importar a quién; hazlo sin preguntar por qué. Haz todo con Amor. Sólo el Amor existe.
Haz siempre caso de la sensación de fuerza que te lleva a actuar. Haz siempre caso de esa Voz Interior y sigue sin desmayo el rumbo del Señor.
No te pierdas un solo amanecer, no des la espalda a una sola puesta de Sol.
“Dios es el Maestro de este juego”.
Libro: "Mi Voz Interior", Paula Sambusini, Ed:Errepar
Baba
«Sadhana, la disciplina espiritual»
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