Sadguru Sri Madhusudan Sai
UN MUNDO UNA FAMILIA
Las naciones están en guerra, las armas nucleares se
acumulan locamente, la crisis
económica se apodera de los países endeudados,
las tasas de suicidio son altas, los conflictos religiosos se estan incrementando, el cambio climático provoca
inundaciones en una región y sequía en otra, las cadenas de suministro mundiales se interrumpen, haciendo que
millones de personas se queden sin alimentos. Las secuelas
de la pandemia aún están lejos de terminar, y más de 800 millones de personas se van a dormir con hambre cada noche. Al mismo tiempo, el PBI mundial ha superado los 100 trillones de
dólares, mientras que los ricos son cada vez más ricos y
se estima que cada 30 horas se añaden 1.000 millones de dólares a la ya desbordante riqueza
de los multimillonarios, durante el último año. En resumen, la brecha entre
los que tienen y los que no tienen se amplía cada día, lo que es
la receta más segura para un desastre global.
¿Dónde está el final de este caos? ¿Cuál es la solución?
La idea india de - Vasudhaiva Kuṭumbakam
- un mundo, una familia, donde cada uno vive para el otro y todos viven para Dios, es la única solución permanente para evitar
la inminente crisis humanitaria mundial. Esta idea está en funcionamiento
en nuestras Fundaciones en todo el mundo, que son parte de la Federación Global
de Fundaciones Sai.
Sri Lanka, que está atravesando una
crisis económica y política sin precedentes
y conocida como la lágrima del Océano Índico, tuvo un motivo para sonreír después de mucho tiempo
con la inauguración de la primera fase del
hospital gratuito de superespecialidades con 75 camas - Sri
Sathya Sai Sanjeevani, el segundo
hospital fuera de la India, después de las Islas Fiji.
Los médicos, las enfermeras, los paramédicos, los devotos
y los nuevos amigos trabajaron sin descanso para que el milagro se produjera en la isla esmeralda; a pesar de que las probabilidades negativas eran
demasiadas, desde la escasez de combustible hasta la de alimentos,
desde la falta de insumos médicos hasta los de energía y la carga de la burocracia; aun así ocurrió por el bien de nuestros hermanos y
hermanas de Sri Lanka.
En Estados Unidos, el Centro People Shores de
Clarksdale, que se creó como un esfuerzo
para mejorar la vida de los marginados en
zonas rurales, especialmente en la región del Delta del Sur, donde el 80% de la población de la
región es de personas de color, celebró su tercer aniversario. Un equipo de mujeres se encargó de ayudar a las madres trabajadoras
a unirse con sus hijos y a los jóvenes con los mayores gracias a la disponibilidad de puestos de trabajo
en su propia ciudad. Por la misma época, este Centro en el Estado de Mississippi
cruzó el río al otro lado
en el Estado de Arkansas para crear otro
Centro en Pine Bluff a fin de dar más trabajo a los
marginados. Mientras esto ocurría
en el sur, en el norte del estado de Nueva York, el tercer centro se abrió en Brooklyn para ayudar a muchas personas sin hogar y jovenes sin trabajo. En tanto
los trabajos iban a la gente en lugar de que la gente fuera
a los empleos, el Centro Médico Gratuito Sathya Sai Sanjeevani
en Clarksdale, que poco a poco
pero constantemente se ganó la confianza y la aceptación de la gente, y atendió a más de 750 de ellos
que carecían de seguro médico y de
prestaciones sociales, planeó su próximo gran salto para
convertirse en un hospital de pleno derecho en un año.
En Australia, el Ashram Corazón de Amor esta preparado para convertirse en un Centro de Desarrollo Humano que ofrece múltiples programas para
jóvenes y adultos; y en Singapur
un simposio sobre problemas de salud mental en
jóvenes y adolescentes fue llevado a cabo por el 1Youth Singapore.
En todos estos lugares estuve presente para participar,
alentar y ayudar a asimilar la idea de
bondad y compasión en el espíritu de
Un Mundo Una Familia.
Y así es, Un Mundo Una Familia, nuestra
nueva visión con la misión renovada de
amar y servir a todos, por siempre.
Fuente: Tomado de Vasudhaiva Kutumbakam numero 17 - Agosto 2022 (Boletin Global Mensual)