Visita divina a Hubli y Karwar - 21 de octubre de 2017.
El avión aterrizó en Hubli, transportando a algunos de los mayores, mientras que muchos ya habían llegado a Karwar para las celebraciones del 50 aniversario del templo de Shirdi Baba, consagrado cincuenta años antes por Swami como “Sai Katta”, en Karwar.
Cuando el Dr. Anant Raikar, de casi ochenta y cinco años de edad, llegó hace unos meses junto a un grupo proveniente de Karwar, para recibir las bendiciones de Swami, el Señor lo bendijo sobre el escenario y le aseguró que visitaría su hogar como había prometido previamente, y también asistiría al 50º. aniversario del Mandir el 22 de octubre.
Swami había anunciado también el Bhoomi Puja para el nuevo campus, “Sri Sathya Sai Satwaniketanam”, si el terreno hubiera estado listo para entonces. Hubo una frenética búsqueda de una parcela adecuada. Si bien el terreno había sido identificado y el trato finalizado, dos días antes de la fecha, los aldeanos se retractaron, ¡exigiendo casi cuatro veces el precio acordado! La única solución disponible era entregarlo a los pies de Swami. En ese momento, el Sr. Raikar ofreció sus cuatro hectáreas y media, que hacía tiempo quería obsequiar a Swami, cerca de Belur, a casi 300 kilómetros del pueblo de Karwar. Swami dijo: “Aceptaré cualquier obsequio sólo si proviene de un sentimiento puro. ¿De qué sirve el agua de mar que no podemos beber? Una pequeña cantidad de agua dulce de un aljibe es todo lo que necesitamos. Dios lo posee todo. Él cubrió la Tierra con un paso y el cielo con otro, pero no aceptará nada, a menos que Le sea dado con pureza”.
Swami fue recibido en el aeropuerto por devotos de Karwar, Hubli y Dharwad. Un abrumado Sr. Anant Raikar derramaba lágrimas de gratitud. Swami se trasladó desde el aeropuerto de Hubli hasta el hogar del Sr. Narayan Niranjan, un devoto a cuya esposa le habían diagnosticado presuntamente cáncer óseo. Swami le había dicho que no temiera, porque no había cáncer, ¡y los resultados de los exámenes habían sido negativos! Se sirvió un refrigerio a Swami, y a continuación Él bendijo a la familia con entrevistas y los aconsejó con respecto a diversos temas. Se ofrendó el Mangala Arati, y Swami se dirigió al hogar de Sri Arvind Ballad, miembro de la Asamblea Legislativa, quien reside en la casa vecina. Allí hizo muchas revelaciones, que dejaron anonadada a la familia.
A continuación, Swami viajó en automóvil durante las tres horas siguientes, para llegar a la casa de huéspedes de la usina de Kodasalli, escondida en la selva, en los suburbios de Karwar. Unos cien devotos provenientes de Puttur estaban esperando, velas en mano, para celebrar Diwali. Al arribar el Señor, eran casi las 21:40 hs., y cuando los niños encendieron coloridos fuegos de artificio, Él se sintió feliz de verlos y derramó abundantes bendiciones sobre todos, con Prasadam antes de Mangala Arati. Había una habitación elegantemente preparada para Swami. Se Le sirvió la cena, después de lo cual Swami se retiró para pasar la noche.
SU MISIÓN CONTINÚA ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario